miércoles, 19 de junio de 2013

relatorio 5 de junio / CAMINATAAN

Fiesta en el camino del río.

Caminar con la voluntad de ir hacia adelante, intervenir el tiempo de la ciudad en un trayecto conocido, estar conectado con el espacio, autorizarse a transformar el tiempo urbano y las convenciones de la presencia. No hay espectáculo. No hay espectadores, hay “modificandos” mutuos, hay libertad en la relación con los otros, con el tiempo, con el espacio, con el río con el viento. Los objetos nos miran, nos llaman, el rio nos habla. Nos dice que siempre hemos sido los dueños del tiempo.

Luego de dormir, nos despertamos debajo del puente santa fe, nos reconocimos entre nosotros y empezamos a caminar siguiendo la dirección del río. De ahí en adelante solo recuerdo el llamado del entorno, un intercambio con el río, donde yo ponía algo pequeño y seco el río lo hinchaba y lo hacía grande y vivo.

Me encontré con muchas entidades vivas, con señales de mis compañeros, con llamados secretos de pequeñas y grandes entidades. Conozco el camino del rio hace muchos años y pienso que este día hemos desarrollado una manera de estar, una forma de comunicación con el espacio y los otros que me da un nuevo sentido de pertenencia, una especie de identidad nueva, una forma diferente de habitar el tiempo urbano que no hubiera sido posible sin atravesar la experiencia de estar, de construir una forma de relación con el tiempo y el espacio urbanos.

También pensaba que los arboles, el rio, el viento, los animales, la tierra siempre “están”. ¿De que se trata entonces esto de modificar nuestra presencia para poder entrar en conexión con el tiempo y el espacio? ¿En dónde estamos cuando no “estamos”?

Diego.

miércoles, 5 de junio de 2013

Relatorio miercoles 29 de mayo.

El encuentro del miércoles 29 de mayo comenzó con una conversación en la que coordinamos algunos detalles para la experiencia de caminata creativa que haremos el miércoles 5 de junio a las 16 horas a orillas del río. Acordamos encontrarnos a la altura del Puente Santa Fe, 15:45h para organizarnos un poco, llegar al lugar y a las 16:00 comenzar la caminata por el trayecto que va por la vera del Río desde el puente Santa Fe, hasta el Puente Avellaneda. También se recordó la idea de llevar un objeto y se remarco la importancia de que este objeto tenga un significado para nosotros, ya que se propone un momento de encuentro y exploración del mismo y luego la transformación que ocurre en nuestros cuerpos al despojarnos de él (así que atención a los objetos!!!) "El río lleva, trae; algo nos deja, algo se va" dice Liliana Herrero… Luego conversamos un poco acerca de algunas líneas significativas para considerar en esta primera experiencia creativa. El río que atraviesa la ciudad, la ciudad como cuerpo, el río como las venas de ese cuerpo, la circulación, las transformaciones y cambios en la ciudad, las contradicciones, tensiones que se pueden ver en los dos márgenes del río. Por un lado el "progreso" y el avance de proyectos inmobiliarios vinculados al "crecimiento y modernización" de la ciudad y por el otro una zona de galpones abandonados y todo lo que podamos encontrar allí. También aparece la idea del río como algo en contínua transformación y movimiento. Rodolfo sugirió a los que puedan, darse una vuelta por la zona antes del miércoles para observar y contactarse con el espacio a ver qué ideas o sensaciones despierta en relación a los recorridos personales de cada uno. También se hablo de hacer una reunión extra el domingo 9 en alguna casa para avanzar con las lecturas y discusiones del libro de taanteatro con más tiempo y quizá también ver algunos videos. Luego hicimos una entrada con foco en el centro desde el movimiento y el sonido, buscando abrir espacios en la zona pélvica principalmente. Trabajamos algunos ejercicios del esfuerzo coordinando sonido y movimiento. Buscamos explorar sonidos que acompañen los ejercicios, trabajamos en ejercicios de apertura, amplitud, también en duplas atendiendo a la conexión y la mirada. En la parte creativa trabajamos el mandala haciendo foco en la danza de la serpiente, la recordamos entre todos y completamos la segunda parte que faltaba (ejercicios inspirados en el yoga). Vimos ese momento de transición y cambio de piel de la serpiente que previamente ha recibido un baño, una lluvia de sonidos y frecuencias que han quedado vibrando en el ambiente. Desde ahí comenzamos a despertar y reconocer al nuevo cuerpo incorporándonos de a poco con una danza más pautada y organizada por los ejercicios de la segunda parte. La propuesta creativa fue realizar una caminata en la que, a mitad de camino nos encotráramos con un objeto (el libro o vestuario seleccionado para ese día) este objeto propone una novedad y una transformación en el cuerpo y la danza y nos lleva al otro extremos del salón con un humor y un carácter particular. Una vez que llegamos al final del salón dejamos el objeto para volver al punto de inicio de la caminata de espaldas sosteniendo el contacto energético con esa sensación y transformación que se produjo al despojarnos del objeto. En ese trayecto nos acompañaron los sonidos de algunos pájaros. Y creo que eso fue todo, o al menos lo que recuerdo. Olvidamos elegir una palabra para cerrar porque se paso muy rápido el tiempo pero Rodolfo sugirió “Camino” veamos a ver que piensan… Un abrazo oblicuo de otoño y hasta el miércoles! Constanza

lunes, 27 de mayo de 2013

Relatorio Miercoles 22 de Mayo

Cae el sol de la tarde, el frío comienza a condensarse en el ambiente y Rodolfo intenta encender la turbina. Los nuutanes se reúnen nuevamente, para crear, desnaturalizar, despojarse del cotidiano y vivenciar profundas transformaciones. Los cuerpos comienzan a crear calor, a centrar su yo profundo y ubicarse a sí mismo en el espacio junto a los allí presentes. Crear un nuevo parámetro de visión, tanto en lo sensitivo como lo emocional. Estos procesos son tan necesarios, vitales; por momentos fuimos piedra, aire, manipulamos fuego y nos sambullimos en el agua. Cada día intentamos componer una comunicación en conjunto del cuerpo físico y espiritual, el pensamiento y lo intuitivo, el instinto y la razón, donde procuramos tomar conciencia de las extremidades, de los límites del cuerpo, ir de un polo al otro. No es fácil, por lo menos para mí, una cuestión de perseverancia, compromiso y voluntad espontánea. Por momentos fuimos guerreros enfrentándonos, provocando, luchando, ofreciendo, amando, solo siendo, solo actuando. Se dio lugar al debate y la propuesta, a ideas creativas y a la concordancia en grupo. Llegó el momento de la danza, la conformación de uno de los mandalas, la danza de la serpiente. Algo muy importante para el cierre o la apertura de ciertos momentos es el de ubicar nuestro centro, volver al mundo que abarca nuestro cuerpo, concentrar toda esa energía trabajada en la actividad. La consigna de ese día era a partir de dos objetos que debíamos llevar: un libro, que realmente signifique o haya significado algo importante para nosotros, y una prenda, sea cual sea, signifique algo o no para nosotros. Yo me lamento mucho no haber recordado esa consigna, la verdad que eso fue un punto importante donde despertó inquietudes y sonidos en mí, lo cual lo focalice en la primera danza. Al comienzo de la danza y de la creación de una esfera, introducirla dentro nuestro crea un magnetismo, despierta la serpiente y lubrica nuestra columna vertebral, recorre puntos energéticos esenciales: ¿Donde estoy ubicado?, ¿Qué hago conmigo y mi entorno?, el ¿Cómo estoy? , el ¿Cómo amo?, ¿Cómo me expreso?, ¿Cómo pienso?, ¿Quién soy? , centrarse en aquellos que necesitamos trabajar más o queremos conocer más sobre él, indagar en su zona, emitir un sonido e intentar escuchar su resonancia dentro y fuera, tomar fuerte conciencia de las tensiones residuales y transformarlas en voluntad. Todo este proceso es importante ya que después nos desplomamos, morimos, cambiamos de piel, nos despojamos de aquello que intentamos eliminar para nacer en la danza continua con una nueva piel, una nueva percepción y una nueva conciencia de las tensiones, pero ya partiendo de los objetos requeridos que darían el pie a nuevas creaciones y transformaciones. Primero íbamos hacia la prenda; ella nos proponía una constante resignificación, de ella misma y de nosotros, objetivizar esa tensión provocada, dramatizar la sensación implantada por ese objeto, ¿A dónde nos llevaba? ¿Quiénes éramos? ¿Qué queríamos? ¿Por qué? Mi experiencia con el objeto, que no era mío si no de Rodolfo, fue grata, creo en mí un animal curioso pero tímido, vi tensiones propias muy interesantes. Luego comencé a ver hacia afuera, a los compañeros allí danzando y la verdad es que no sé donde estaba, en qué momento del espacio y del tiempo estaba cada uno, era totalmente impredecible, eran planetas navegando en la galaxia con diferentes formas, colores, ritmos. Luego al llegar al encuentro con mi libro, que en este caso era una hoja de papel donde llevaba escrito el libro que querría haber traído, perdí total concentración de la danza, de la piel donde estaba introducido. Abrí el papel y decidí leer sobre mí y los recuerdos, charlar conmigo de lo sucedido en el momento. Al instante creé una nueva piel, tal vez la dramatice bastante, poco genuina. Silencio. Uriel

lunes, 20 de mayo de 2013

Imágenes Nutaan CBA Mayo 2013

Relatorio del día 15 de mayo



… En esta etapa del NuTaan, estamos aprendiendo las danzas del mandala de energía corporal y explorando más específicamente la danza de la serpiente…
Conociendo la capacidad de las serpientes de cambiar su piel vieja por una nueva, nosotros la tomamos como imagen para experimentar en la danza. No se trataba de andar arrastrándonos apelotonados como gusanos y en el primer enganche que encontremos quedar todos sin ropa. Aunque podría haber sido divertido; creo que se lo voy a proponer a Rodolfo.
El mandala de energía corporal es una serie de danzas que van en progresivo y preparan el cuerpo para un acto creador. En cada danza convocamos y creamos, por medio de la voluntad, una energía diferente que está en tensión con nuestro cuerpo físico-emocional, con los demás cuerpos físico-emocionales que están presentes y con lo externo, lo espacial.
La danza de la serpiente, como el mandala en su totalidad, es una meditación activa que trabaja con la visualización y el uso de mantras indígenas e hindúes, el contacto sensible con los órganos y zonas del cuerpo (Zonas sexuales, endocrinas, zonas emocionales, vocales y del pensamiento).
Entonces, luego de ese contacto energético con nuestro cuerpo la consigna es que improvisemos dos danzas. Al finalizar la primera nos tomamos un momento de reflexión acostados en el piso para tomar conciencia de ese proceso, de abandonar y cambiar la piel…

…Qué hábitos corporales repetimos, en qué tipo de tensiones no estamos acostumbrados a entrar, juicios extremos, lo grupal, lo individual, etc…

…para tomar la decisión de abandonarlo, despojarnos de eso y producir una segunda danza diferente en tensión con aquello viejo y lo nuevo que aparece.
Pero ¿qué sentido tiene tomar clases de entrenamiento físico, de esfuerzo y danza a media semana con todo el estrés encima y siendo una de las primeras noches más frías del año? Y ¿qué pasa cuando encima de apoco te vas dando cuenta que ese es el camino que vas haciendo en la vida? Cansarse, transpirar, que te duelan las piernas el resto de la semana, salir de tu casa, moverte por tres horas y cada vez hay que exigirse mas. Y es que todo esto es solo una cara de la moneda. Además, esta no es una moneda común. Es una que tiene muchos lados, como un prisma o una piedra cristalizada, siempre podes ver en la transparencia el otro lado. Trabajar con el cuerpo desde el arte, desde la danza en su sentido más amplio de la palabra es un desafío constante, es como jugar a la luchita con uno mismo.
En la primera danza del ejercicio, me pasó que sentía el cuerpo duro, trabado y cuando me largué  a improvisar traté de mover todos esos lugares  mas tensos: la espalda, las muñecas, la cadera, la voz… y entré en un devenir de movimientos y ritmos en donde aparecieron saltos, movimientos explosivos en los brazos no tan ligados y suaves como estoy mas acostumbrado. Muchos sonidos vinieron por la agitación y la variación en la respiración  que me dejaron descubrir otros tonos, intenciones y a la vez en cada sonido el cuerpo se acomodaba de formas distintas para poder producirlo.
Fue interesante porque yo estaba concentrado en cómo operar el cuerpo para que ese devenir no se cortara, a veces dejando que se produzca solo y otras ejecutando un movimiento llevándolo al máximo. Todo eso adquiría un flujo en el que la danza no ocultaba las caídas, la agitación como errores, sino que funcionaban creativamente.
En el momento de finalizar la primera danza, pensé en que había llegado tan cansado a la clase y de repente estaba haciendo tantas cosas. El ejercicio me hizo reflexionar sobre la retención. Todo aquello que en el cotidiano retengo, anudo en el cuerpo y que no sale.
¿Por qué no sale, cómo sería si pudiera lograr que esas sensaciones estuvieran siempre, qué me lo impide?
Es cierto que el contexto de lo cotidiano y de una clase son diferentes. Pero también es cierto que hay una parte mía que queda en el olvido. Quizás por eso me guste danzar.
Cosa que puse en práctica en la segunda danza intentando mirar a cada compañero sin dejar de registrar el cambio que se había dado y aunque sea por un ratito verlos de otra manera y recibir sus mundos creativos, ver por donde anda danzándose cada uno. Yo los veía distintos; a algunos era como si fuera la primera vez que los veía. Yo estaba diferente y ¡cómo cambian las cosas! es voluntad de tensión, la voluntad de producir un acto creativo que permite abrir otras puertas en uno.


Fabricio.

viernes, 17 de mayo de 2013

relatorio del viernes 26 de Abril


Estiramientos suaves en el piso
Trabajos en pareja: ´--uno sostiene con las manos a la altura del corazón el cuerpo del otro que entrega el peso y respira desde el centro hara con sonidos de diferente intensidad y volumen luego cambio de rol
Caminatas en pareja: - uno camina respirando desde el centro hara, sacando la voz mientras otro lo sostiene con sus manos en la pelvis acompañando el recorrido hasta el final del trayecto, cambio de rol.
Mandala de energía
dormir , despertar, flechas (las diferentes posiciones), creación de una esfera de energía para introducir en en el corazón
Bailamos la danza del corazón
Leemos del Diccionario de los Símbolos el significado de corazón
Palabra final: locro profundo (anticipándonos al 1º de mayo)
 
Antonieta

viernes, 10 de mayo de 2013

Relatorio Miércoles 08/05/2013



Relatorio Miércoles 08/05/2013
 
Los encuentros constan de 4 momentos.
1ero. Momento: Calentamiento corporal y vocal
Ejercicios de estiramiento de columna. Elongaciones.
2do. Momento: Esfuerzo
Caminatas: salimos de a dos y hacemos el  cuadrado, le agregamos brazos, intercalamos chasquidos y palmas.
Ginga: paso base de capoerira, le agregamos brazos en posición de protección de genitales y rostro. Le agregamos  golpes de manos en el piso. Le agregamos patada rastrera y giro. Le agregamos patada voladora.
Lo mismo de a dos enfrentados mirando al adversario.
3 minutos de improvisación de todos los pasos de ginga libre.
Importante! Siempre hacemos la misma caminata hacia adelante y hacia atrás, para tener un registro opuesto y complementario de nuestro cuerpo y sus dimensiones expansivas.
3er. Momento: Mandalas /ejercicios de tensión.
Mandala: Circulo.
Siempre empezamos con la posición Cero: convoco en una esfera el universo, que sostengo con los brazos en forma circular creando una energía. Desde allí continuamos con las danzas en este caso…
Danza de la serpiente.
Por el piso pélvico introduzco una esfera de calor y energía con un sonido que luego va transitando por toda la columna hasta salir por coronilla.
4to. Momento: Improvisación/creación.
Posición Cero.
Danza de la serpiente: 10 minutos para profundizar en la energía de la serpiente, la sensación de fuego, de agua, de esfera, que se adueña de nuestro cuerpo, una fuerza viva y movediza que nos transforma mientras se desplaza llenándonos de sensaciones.
Continuamos con la lectura…
Leemos del libro Taanteatro- Teatro coreográfico de tensiones  el capítulo Procesos y Prácticas, Mandala de Energía Corporal (pag. 153 – 154)- Teoría del mandala  y funciones principales del mandala corporal (pag. 154 – 156).
Al finalizar ronda en círculo, tomados de las manos, contamos hasta diez y gritando una palabra elegida por el grupo nos soltamos de las manos.
Palabra Clave: Intenso!!!
Virginia

RELATORIO Viernes 3 de mayo de 2013



RELATORIO
Viernes 3 de mayo de 2013

Como un comienzo para algunos (Anita y Leticia, participaron por primera vez) y un reencuentro para otros que hacía mucho que no íbamos, se deslizó vibrante el encuentro pasado. Estábamos, además, Javiera, Romina, Antonia, Uriel, Virginia, Georgina y Rodolfo. También se sumó Yami, como observadora.
Viernes… galpón, luz de atardecer que se va apagando, pero envuelve en una especie de intimidad… lindo! La serpiente dormía todavía y en cada etapa del encuentro nos fuimos preparando para activarla y dejarla serpentear tranquila hacia el final.
Como cada encuentro, una buena entrada en calor, progresiva, disfrutable. Primero lo primero: posición cero para conectar con toda la energía interna y externa (atraer el caos y darle forma) y contrapostura; después la polea, para empezar a activar la fuerza (la cualidad de piedra); postura de gato, para la columna; posición del perro (adomuka)…
Ya con el calorcito interno… a prender el fuego con un buen esfuerzo, también apuntando a activar todo el cuerpo, desde la fuerza, la precepción y la coordinación para tenerlo disponible, haciendo foco especialmente en la columna: caminatas para los pies (en punta, talón, chuecos y patizambos; combinados, de frente y de espaldas); ejercicios para las piernas y el centro; ondulaciones de cuello, plexo solar y pelvis (solos y en parejas), y de toda la columna; y saltos.
La improvisación, esta vez, consistió en una preparación para la danza de la serpiente del mandala de energía corporal (que es la que le sigue a la danza del corazón). Entonces, primero hablar un poco del ser serpiente (la kundalini, del yoga) y los rastros reptilianos que todavía tenemos, la idea de pensar la columna proyectada hacia arriba y hacia abajo, como una cola de reptil. Después, a danzar: dormir, acordar, despertar con el león, cerar, formar una bola de energía (material, lo más material que se pueda) e introducirla por el primer chakra (bastante potente la imagen!) y a ver cómo resuena en la columna, qué energía se despierta, y cómo! Fuerte… Unos quince minutos. Cerar de nuevo, repasar a vuelo de pájaro (interno) la experiencia para hacerla consciente. Y después unas preguntitas para trabajar a modo personal: qué fue lo más representativo (cuándo nos quisimos hacer las víboras)? Y en qué momentos o lugares actuamos más movidos desde la energía?
Algunos datos para tener en cuenta: la visita de Maura Baiocchi en junio. La posibilidad de salir a trabajar en algún espacio urbano (y “ensayo” previo en algún lugar intermedio donde podamos estar tranquilos pero con la ciudad de fondo).
La serpiente se despidió con un “Sssssssssssssssssssssssssssssss” vibrante y conjunto. 
Cecilia.

martes, 30 de abril de 2013

Relatorio Clase del miércoles 24 de abril



Durante este primer mes de trabajo, nuestras prácticas se han divido en dos partes: la primera, basada en ejercicios y caminatas de esfuerzo destinadas a fortalecer  la musculatura, la resistencia, trabajar la orientación y la dirección en el espacio, la presencia escénica y la relación con los otros cuerpos; y la segunda, que contempla un trabajo de creación/improvisación desde  el Mandala de Energía, entendido como una serie de 7 danzas que nos llevan al maritmo.
La clase del miércoles fue abordado desde la lectura. Comenzamos con un texto del libro de Taanteatro titulado (valga la redundancia) “ Teatro Coreográfico de Tensiones” (pag.63) en el que se explica el significado de la palabra tensión en danza y la relación que la misma genera entre  los cuerpos, entendiendo la palabra entre como eje principal en este proceso comunicativo.
Luego continuamos con algunos ejercicios de esfuerzo, haciendo foco en el piso pélvico y la cintura escapular, que nos serviría no solo para entrar en calor, sino también que dispondría el cuerpo para lo que vendría después.
En la segunda parte, practicamos el mandala de energía: dormir, despertar, la danza del león, cerar (1) la danza del arco la flecha y el blanco agregando, esta vez, la danza del corazón.
LA DANZA DEL CORAZóN consiste en formar una esfera (una especie de mundo propio) dándole cierta personalidad: un color, una textura, una forma…para luego introducirla en nuestro pecho y extraernos el corazón. Así, con el corazón en la mano y el pecho abierto,  comienza una danza intensa, profunda, llena de aspectos movilizadores  y contradictorios (utilizo esta palabra  para expresar la sensación adversa del peso del corazón en la mano y al mismo tiempo el  vacío  de tener un hueco en el alma). En ese estado, en esa descorazonada danza se produce un intercambio, entregamos nuestro corazón para recibir el de otro. En ese entre nace una danza nueva,  mucho más intensa, explosiva!
Finalmente ceramos y nos despedimos con la palabra: TIEMPO CORAZON
(1)    Cerar es la posición cero.  Desde donde nada o todo puede suceder. Es el caos.

Romina